Bosques espesos, montañas oscuras, cañones profundos y playas de ensueño de la costa adriática son algunas de las cosas que podemos encontrar en Montenegro. Mientras que la vecina Croacia presume de una especial popularidad entre los turistas, la versatilidad de Montenegro sigue a día de hoy pendiente de ser descubierta por muchos viajeros.
Montenegro es uno de los destinos sin duda más bonito de los Balcanes. En términos de diversidad y belleza de los paisajes, Montenegro no es de ningún modo inferior a la vecina Croacia. ¿A continuación puedes ver los 10 lugares que ver en Montenegro ¡no te quedes sin descubrir este pequeño país!
Qué ver en Montenegro
1. Kotor
La Bahía de Kotor se encuentra en el oeste, en dirección a la frontera con Croacia, y tiene unas ligeras semejanzas a un fiordo. La localidad de Kotor vale mucho la pena ser visitada, y se puede encontrar en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO por la relevancia y belleza de su centro histórico. Perast, otro posible destino, brilla por si sola con la elegancia del casco antiguo, así como también por los numerosos edificios de la Edad Media. También deberías visitar Porto Montenegro Marina, en la Bahía de Kotor, donde podrás disfrutar de una mágica vista del sol durante el atardecer entre los lujosos yates.
2. Perast
Este encantador pueblo costero, también en la Bahía de Kotor, destaca por su belleza tranquila y sus elegantes palacetes. Lo más impresionante de Perast son sus dos islas, la Isla de Nuestra Señora de las Rocas y la Isla de San Jorge. La primera alberga una iglesia con un museo, mientras que la segunda es un convento medieval. Se puede acceder a la isla mediante un corto paseo en barco, lo que convierte a Perast en una de las localidades más fotogénicas de Montenegro.
3. Parque Nacional Durmitor
Este parque, declarado Patrimonio de la Humanidad, es un paraíso para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre. Con sus picos montañosos, lagos glaciares, cañones y bosques densos, ofrece una gran variedad de rutas de senderismo. El Cañón del Tara, el más profundo de Europa, es una de sus principales atracciones. En invierno, el parque se convierte en un destino popular para el esquí y el snowboard.
4. Budva
Budva es una de las ciudades más turísticas de Montenegro, conocida por sus playas, su vibrante vida nocturna y su casco antiguo amurallado. El casco histórico de Budva, con calles estrechas y edificios medievales, se mezcla con modernos complejos turísticos. A lo largo de su costa, se encuentran algunas de las playas más famosas del país, ideales para nadar, tomar el sol o practicar deportes acuáticos.
5. Cañón del Tara
El Cañón del Tara, uno de los cañones más profundos del mundo, es una maravilla natural que ofrece vistas impresionantes y actividades como el rafting. El río Tara fluye a través del cañón, creando un paisaje de bosques y acantilados. Una de las formas más emocionantes de explorar este lugar es a través de una caminata o un recorrido en barco por el río, disfrutando de su biodiversidad y belleza natural.
6. Sveti Stefan
Sveti Stefan es una isla pintoresca, famosa por su pequeño pueblo de casas de piedra que se conectan con la tierra firme por un estrecho istmo. Hoy en día, el lugar es un complejo turístico de lujo, pero sigue siendo uno de los destinos más emblemáticos de Montenegro. Puedes pasear por sus calles empedradas, disfrutar de sus vistas al mar y, si tienes acceso, relajarte en sus playas privadas.
7. Lago de Skadar
El Lago de Skadar, el mayor lago de los Balcanes, se extiende entre Montenegro y Albania. Es famoso por su biodiversidad, especialmente por sus aves, y por su paisaje sereno rodeado de montañas. Se puede explorar el lago en barco, visitando pequeños pueblos y monasterios que se encuentran a orillas del agua. Es un excelente lugar para el avistamiento de aves, la pesca y el senderismo, y ofrece una atmósfera tranquila y pintoresca.
8. Cetinje
Cetinje, antigua capital de Montenegro, es una ciudad cargada de historia y cultura. Se encuentra en un valle rodeado de montañas y es conocida por sus museos, iglesias y monasterios. El Monasterio de Cetinje, la residencia presidencial y el Museo Nacional de Montenegro son algunos de los principales atractivos. Su arquitectura colonial y su ambiente relajado ofrecen una experiencia fascinante para quienes buscan entender más sobre la historia y la identidad montenegrina.
9. Monasterio de Ostrog
Este monasterio, uno de los destinos más sagrados para los ortodoxos, está incrustado en un acantilado en la región central de Montenegro. Fundado en el siglo XVII, el Monasterio de Ostrog está dedicado a San Basilio, y su ubicación espectacular sobre la roca lo convierte en un lugar de peregrinaje y de vistas impresionantes. El monasterio es famoso no solo por su arquitectura, sino también por el ambiente místico y la serenidad que se respira en sus alrededores.
10 Parque Nacional Biogradska Gora
Uno de los tres parques nacionales más antiguos de Europa, Biogradska Gora es un santuario natural de bosques primarios. Aquí se encuentra uno de los últimos bosques vírgenes de Europa, con árboles que superan los 500 años de antigüedad. El lago Biogradsko, en el corazón del parque, es un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza, hacer senderismo o simplemente relajarse en un entorno tranquilo y puro.
Cómo llegar a Montenegro
La forma más rápida, económica y menos complicada de viajar a Montenegro es en avión. Puedes viajar a la capital del país, Podgorica, desde varias de las ciudades de España. Como alternativa, puedes optar por viajar a la localidad costera de Tivat, ubicada en la Bahía de Kotor.
Como ciudadano español no necesitas un visado para acceder a Montenegro a no ser que excedas los 90 días en el país. En el caso que permanecer en el país durante más de 90 días es necesario un visado.
La manera más popular de explorar Montenegro es alquilando un coche. La mayoría de las veces los vehículos de alquiler no son muy caros, y alquilarlos suele ser bastante fácil. El único requisito que necesitas cumplir es tener un permiso de conducción. Sin embargo, tienes que tener en mente que muchas de las carreteras que se encuentran en las zonas más rurales suelen estar desiguales y con manca de señalización, por esta razón, en el caso que quieres viajar por estas áreas a tu aire deberás prestar un poco más de atención. Cabe enfatizar que por lo general viajar por Montenegro, especialmente por la zona de la costa, no suele plantear ningún tipo de problema.
En el caso que no quieras alquilar un coche o quieras permanecer en un solo lugar, siempre puedes utilizar la red de autobuses y trenes para realizar excursiones. Un viaje suele costar entre 0,50€ y 5€ dependiendo de la longitud del trayecto.
Información sobre Montenegro
Durante casi 90 años Montenegro formó parte de la República de Yugoslavia, y fue declarada independiente en el año 2.006 después de haber llevado a cabo un referéndum. Debido a su estrecha relación con Yugoslavia, muchísimos grupos étnicos diferentes viven armoniosamente en Montenegro, desde serbios, albanos hasta croatas. El impacto de esta diversidad se ve reflejado en la cultura del país, así como también en las lenguas habladas a lo largo de todo el territorio montenegrino.
Montenegro es uno de los países de menores dimensiones de Europa, lo que lo convierte en un destino ideal si se busca sumergirse en pleno contacto con la cultura local y con sus residentes. A pesar de su tamaño, Montenegro ofrece una variedad escénica impresionante que le convierte no solamente en un destino interesante para los amantes de las playas, sino que también para los viajeros que buscan realizar actividades, explorar y conocer la cultura. ¿Sabías que en el sureste de Montenegro se encuentra el cañón más profundo de toda Europa? ¿O qué los osos y lobos vagan libremente por los vírgenes bosques del país? ¿O quizás que hay decenas de resorts de esquí en Montenegro? ¿Estás buscando las playas y bahías con más encanto del Adriático? Montenegro te ofrece una gran cantidad de fenómenos naturales vírgenes en las localidades costeras. Lugares con un encanto único en los que encontrarás plena evasión de cualquier aspecto que pueda relacionarse con la cotidianidad.
